
El cuerpo, lejos de hallarse desconectado de la mente y las emociones, constituye un fiel reflejo nuestra realidad psicológica, ya que guarda todas las memorias y vivencias que la persona ha experimentado a lo largo de su vida. La realidad inconsciente, consciente, mental, emocional y bioenergética se halla en el cuerpo. Por tanto, la terapia psico-corporal permite el tratamiento de una gran variedad de aspectos.
No hay trabajo emocional completo sin la participación del cuerpo. Las tensiones crónicas son en realidad acorazamientos y defensas que guardan memorias emocionales. Un trabajo psico-corporal permite su total liberación e integración.
El cuerpo nunca miente, y permite el acceso directo a aspectos inconscientes cuya resolución se hace imposible con una terapia a un nivel exclusivamente mental.
La terapia psico-corporal devuelve la salud física a medida que se disuelven las tensiones, y también la salud psicológica a medida que derriba las defensas y libera las emociones reprimidas, devolviendo a la persona su "cuerpo original" libre de memorias y traumas.
La terapia a través del cuerpo es altamente experiencial y movilizadora, la persona toma consciencia directa de su problemática, liberándola al mismo tiempo.
Las principales corrientes que utilizo en mi consulta son el Análisis Bioenergético y la Biosíntesis, una combinación que permite un tratamiento psico-corporal profundo y completo.